Tener una casa de verano implica conseguir una vivienda acondicionada para poder sobrellevar las altas temperaturas y conseguir desarrollar nuestro día a día con el mayor confort posible. Y es que las casas de verano deben cumplir al menos con 2 premisas importantes; mejorar nuestro descanso y ofrecernos una mayor funcionalidad para disfrutar al máximo de nuestra estancia en ella.
Para conseguir estos objetivos hay 5 características que debemos incluir en nuestra vivienda veraniega.
1- Ventanas y puertas de buena calidad
Los cerramientos son muy importantes ya que nos ayudarán a mantener un ambiente fresco en el interior, evitando tanto que entre el calor del exterior como preservando el frescor del interior. Son un complemento indispensable si utilizamos aire acondicionado porque de esta forma evitamos las fugas del aire fresco que estamos utilizando para enfriar la casa.
2-Aire acondicionado
Las altas temperaturas que estamos sufriendo durante los últimos años han hecho del aire acondicionado un elemento casi imprescindible en nuestro hogar. Hay distintos tipos de modelos que se pueden adaptar a nuestras necesidades consiguiendo el confort térmico que necesitamos en nuestra vivienda para pasar mejor el verano.
Fuente: www.hola.com/
3-Colores claros
Optar por una decoración en tonos claros no es sólo una cuestión de estética. Es también una cuestión práctica, ya que los colores claros o neutros son más frescos, aportan calma y serenidad y dan una sensación de amplitud. Los tonos blancos, beige, o grises en sus tonalidades más claras son una buena apuesta.
4- Adaptar terrazas o porches
El verano es el mejor momento para sacar partido de las zonas al aire libre; una terraza, en el caso de vivir en un apartamento, o un porche con jardín si hablamos de una vivienda unifamiliar. Estas zonas hay que adaptarlas para poder pasar buenos momentos en ellas, disfrutar y relajarse al aire libre cuando el sol ya no es tan fuerte.
Foto: jardinespequenos.com
5 – Piscina
Contar con una piscina es algo que no tiene precio en verano. Si el espacio o el presupuesto lo permiten, contar con una zona donde refrescarse es un valor añadido que nos ayudará a huir de las altas temperaturas y el aburrimiento.
Además, hoy en día hay muchas posibilidades para instalar una piscina tanto en una terraza, como un ático como en una zona con jardín.
